Una triste realidad es que hoy en día muchas empresas, cuando hablan de aprovechar la era digital e internet para sus negocios, sólo piensan en una de 3 posibilidades: tener presencia en las redes sociales (sin una estrategia de marketing digital), poner una tienda en su sitio web o pagar por publicidad en línea.
Por un lado las redes sociales requieren de contenido de valor para funcionar, mientras que una página web con una tienda necesita una estrategia de marketing para generar tráfico y aumentar las ventas. El problema es que al hablar de ambos requisitos, también sucede que muchos piensan en anuncios.
¿Por qué la obsesión con la publicidad en línea?
Porque es una costumbre. El siglo XX estuvo lleno de avances e innovación tecnológica en cuanto a comunicación y rapidez de la información. La radio y el cine se fortalecieron y después apareció la televisión que poco a poco llegó a todos los hogares de los consumidores. Con ello, había forma de mostrar mensajes a cada uno, todos los días, lo cual se sumó a medios impresos, anuncios espectaculares, y así la publicidad tomó el centro del escenario de marketing.
Sin embargo, la fortaleza de la mercadotecnia está atrás: en las estrategias para definir la segmentación de la audiencia y la comunicación que habrá con cada cliente potencial o actual. Para ello la tecnología digital sirve, y mucho: es posible saber qué hace cada persona, qué le gusta o lo que le inquieta y, por supuesto, también en internet se dieron espacios para anuncios publicitarios.
La realidad es que estos espacios con imágenes y texto promocional, cada vez son más ignorados, ya que la publicidad online es sólo una de las herramientas para la ejecución de una estrategia de marketing digital. Si se utiliza como hace 50 años, para llegar a muchas personas, sin un enfoque para llegar directamente hasta los interesados potenciales, sólo se desperdiciará dinero.
Y es que las tradiciones pueden dañar a los negocios, ya que ni siquiera los negocios de hace 50 años lo hacían por gusto, sino porque era la única forma: distribución masiva. Hoy en día es posible utilizar herramientas digitales para aumentar ventas a través de experiencias personalizadas.
Los anuncioes en línea sirven y tienen diferentes formatos, como los banners en sitios web, servicios como SEM, display online, etc. Sin embrgo no son la única herramienta disponible y si una agencia te ha dicho que es lo mejor, aléjate cuanto antes y acude con una agencia de marketing que sea profesional y tenga expertos en el tema. La publicidad sirve, pero es poco y una parte pequeña (aunque vistosa) de todo lo que ofrecen las herramientas en línea, como las estrategias de marketing de contenidos, la metodología inbound o algo tan común como el SEO.
